Comer a bordo
Mi primer vuelo fué en 1956 (creo) con 6 años, a bordo de un DC-3 de Iberia en trayecto Málaga/Madrid, acompañado de mi abuela paterna. Sentí una curiosidad extrema propia de mi edad y eso quedó grabado en mi mente, como si fuera una premonición de que mi futuro profesional iba a estar relacionado algún día con la aviación comercial. En al año 1963 mi padre Pedro de Acuña Muñíz, pasó a ser el concesionario del Bar Restaurante y cantina del aeropuerto de Málaga. El bar restaurante no era sino lo que fué durante muchos años el aeroclub. Yo solía ir con cierta frecuencia al restaurante, cuando estaba libre de colegio, es decir los fines de semana. Digamos que me picó el gusanillo de la hostelería seguramente por aquello que " de raza le viene al galgo" Ahí empecé a hacer mis primeros pinitos en catering, ayudando a suministrar a las compañías extranjeras, termos de agua caliente, café, hielo, sandwiches para tripulación, y algún que otro tipo de complementos, que dicho sea de